.

Portada Emison Medio Ambiente

.

.

.

LAGUNAJE PROFUNDO

La técnica de depuración de aguas residuales mediante el sistema de lagunaje profundo se emplea como paso siguiente a los tratamientos clásicos de depuración en base a un tratamiento primario y secundario.

La base del funcionamiento de esta técnica es la regeneración de las aguas, a partir de la acción de microorganismos, la luz y especies vegetales, y el objetivo, aportar soluciones a la creciente demanda de agua, mejorando la conservación de las cuencas fluviales y, reutilizar las aguas residuales regeneradas en condiciones que garanticen su plena calidad.

Cabe decir que esta técnica se encuentra muy desarrollada, a causa de los diversos estudios que sobre ella se han realizado. La optimización de resultados se consigue trabajando con diferentes tiempos de residencia hidráulica y combinando, además, otras variables de manejo técnico como los niveles óptimos de profundidad para el influente y el efluente, control del crecimiento masivo de algas, etc.

El lagunaje profundo frente al convencional presenta algunas ventajas: ocupan menor superficie y, por lo tanto, menor inversión en terrenos y su preparación. En climas áridos o semi áridos, se reducen las pérdidas por evaporación, mejorando la calidad final del agua, sobre todo si va destinada al riego. También tiene mayor capacidad de retención de calor durante los meses fríos.

Una laguna profunda se construye en forma tronco piramidal, con una profundidad de aproximadamente 5 metros y un volumen variable según las necesidades. La estanqueidad de la balsa, para evitar filtraciones al subsuelo, se garantiza mediante la instalación de un recubrimiento de malla geotextil y de capa de polietileno de alta densidad para evitar filtraciones. La entrada del agua residual se realiza por el fondo, evitando turbulencias en el medio. Modificando el caudal de entrada y de salida para un mismo volumen de acumulación, el tiempo de retención hidráulico en el interior de la laguna variará, o lo que es lo mismo, el tiempo que la flora microbiana presente en la laguna actúa depurando el agua. Este será el parámetro que determine la optimización del proceso.

Los parámetros físico-químicos de control de estos procesos son prácticamente los mismos que en un tratamiento convencional de aguas residuales, pero medidos en perfiles de profundidad, metro a metro. Los parámetros biológicos, también realizados en perfiles de profundidad son las medidas de densidad y biomasa de fitoplancton, protozoos, rotíferos y crustáceos plantónicos. Todos ellos deben ser estudiados y analizados para llegar a conclusiones que permitan reutilizar esta agua en algún uso secundario, principalmente riego.

La actividad biológica de una laguna profunda, debido precisamente a esta profundidad tiene características diferentes en dos épocas, una primera de estratificación térmica, durante los meses cálidos, y una segunda de mezcla o estable, en la cual la temperatura interna de la laguna es más regular. El paso de una fase a la otra influye el desarrollo físico-químico y biológico del medio en cada época del año. Durante las fases de estabilización térmica, aumenta el grado de reducción de DQO y sólidos en suspensión. A esto debe añadirse que el mejor rendimiento se obtiene para tiempos de retención hidráulica de veinte días.

Con respecto a la evolución de los metales pesados en la laguna, cabe citar que los sedimentos depositados en el fondo actúan como recogedor de metales pesados, factor muy importante en su tratamiento. La reutilización posterior de las aguas tratadas en lagunas profundas como agua de riego es una de la opciones que actualmente cuenta con más futuro, sobre todo teniendo en cuenta que esta técnica mantiene la calidad química y sanitaria del agua depurada.

Los parámetros medios de calidad de agua residual urbana tratada en una laguna profunda demuestran ser valores admisibles para el riego. Debe tenerse en cuenta que la demanda química de oxígeno (DQO), conductividad, etc. son un poco más elevados que agua para riego, siempre teniendo en cuenta que las concentraciones y valores medios de los parámetros varían según zonas geográficas.

La aplicación de un sistema de lagunaje profundo, alimentado con el agua tratada en una EDAR convencional, es un solución barata, con mínimo gasto de inversión y de explotación, basado en un principio natural, mejora notablemente la calidad del agua tratada.

En principio, el uso del agua tratada es muy similar al empleo de cualquier otro tipo de agua, pero, debido a su procedencia, es necesario el estudio pormenorizado de cada caso mediante plantas pilotos, estudios previos, etc. para asegurar la correcta calidad del agua antes de ser utilizada, tanto para riego de cultivos, regeneración de áreas degradadas, campos de golf, o la simple incorporación a un cauce fluvial.

| - ANTORCHAS - | COMPOSTAJE - | - VERTEDEROS - | - AGUAS RESIDUALES - | - VERMICOMPOSTAJE - |

| - INCINERACIÓN - | - LOMBRICULTURA - | - INERTIZACIÓN CENIZAS - | - TRATAMIENTO DE FANGOS - |

| - BIOGAS - | - TRATAMIENTO DE AIRE, HUMOS Y GASES - | - SECADEROS - | - RECICLADO - |

TODOS LOS PRODUCTOS Y SERVICIOS SON FRUTO DE NUESTRA EXPERIENCIA Y TECNOLOGÍA. CONSULTENOS SUS NECESIDADES.

| - ECOLOGÍA -  | - HORNOS - |